Reto: 10 días de zumo de apio

Os propongo un reto que puede que no suene muy bien a priori, pero que puede ayudaros enormemente a mejorar vuestra salud, ya que este zumo tomado en ayunas, gracias a sus sales minerales, vitaminas y antioxidantes, tiene muchísimos beneficios. Vamos a empezar el próximo lunes día 1 y lo haremos durante 10 días. En 10 días seguro que notáis ya sus beneficios de alguna forma (más energía, mejores digestiones, piel más luminosa, etc.), pero para las personas que tienen como objetivo mejorar aspectos concretos o que sufren algún trastorno desde hace tiempo como problemas digestivos o infecciones recurrentes, sería recomendable que siguiesen durante más tiempo para notar mucho más sus efectos en esos problemas concretos (al menos 3 a 6 meses).

¿Qué necesitas?

Cada día vas a necesitar un manojo entero de apio, ya que tenemos que tomar alrededor de 300-400 ml de zumo de apio. Podemos directamente comprar 10 manojos antes de empezar (si tenéis espacio en la nevera, claro!) y sino comprarlos poco a poco. Lo ideal es que sea ecológico, ya que el apio es una de las verduras que más pesticidas y herbicidas absorbe (en ecorgánic, consum y carrefour tienen, sino también podéis pedirlo a algún agricultor online para que os lo lleven a casa), pero si no tenéis acceso a apio ecológico, podéis utilizar el normal y lavarlo bien. 

También necesitaréis una licuadora, lo ideal es que sea de bajas revoluciones, pero sino no pasa nada!. Si no tenéis licuadora, seguro que tenéis batidora, que aunque es un poco más tedioso de hacer, también os sirve.

Si la licuadora es vertical (estilo versapers y similares) es posible que el apio se enganche un poco (depende también de los modelos), en este caso lo que tenéis que hacer es trocearlo antes de meterlo en la licuadora. 

¿Cómo se hace?

Con la licuadora es muy sencillo, simplemente laváis bien un manojo de apio y lo vais pasando por la licuadora hasta obtener vuestro zumo. Es recomendable quitarle las hojas al apio (si tiene muchas) ya que le dan un sabor amargo, por lo que puede resultarnos más difícil de tomar, pero si no os importa podéis dejarlas también. Si tiene pocas hojas y son de color más bien claro, podéis dejarlas sin problema porque el sabor no será tan fuerte.

Con la batidora tendréis que limpiar bien el apio, quitarle las hojas si no queréis que sea tan amargo, trocearlo e introducirlo en la batidora, cuando esté todo bien batido tendréis que colarlo con un colador o con una bolsa de hacer leches vegetales y listo!

Aquí os dejo un vídeo donde salen los dos métodos

¿Cuándo y cómo se toma?

Lo ideal para aprovechar mejor sus beneficios es que os lo toméis por la mañana en ayunas con el estómago vacío. Es mejor beberlo inmediatamente después de hacerlo y esperar al menos 20-30 minutos antes de desayunar. Si no podéis por la mañana, también lo podéis hacer por la tarde con el estómago vacío, de 20 a 30 minutos antes de comer algo o de 30 a 60 minutos después de picar algo ligero o 2 horas después de comer una comida más pesada en cualquier momento del día.

¿Qué puedo hacer si no soporto el sabor?

El sabor del zumo de apio no es muy bueno, pero si encontramos un apio de un color verde más claro y sin hojas, es probable que eso nos ayude a tolerarlo mucho mejor. Si aún así no podéis tolerarlo bien, podéis añadir zumo de limón, manzana o pepino, aunque sus beneficios son mayores cuando se toma solo, pero podéis hacerlo así hasta que poco a poco os vayáis acostumbrando.  Si os provoca algún tipo de nausea o similar (puede ocurrir si tu estómago no está acostumbrado a los zumos verdes), es mejor empezar por menos cantidad y tomarlo lentamente, no de golpe. 

¿Qué propiedades tiene?

Os pongo aquí un listado con todas las propiedades del zumo de apio.