La postura adecuada para ir al baño

Mantener una postura correcta para ir al baño es mucho más importante de lo que os imagináis. Muchos trastornos importantes que a la larga pueden llevar a enfermedades graves pueden solucionarse con sencillas intervenciones relacionadas con la nutrición y el estilo de vida. En concreto la postura que mantenemos al defecar es fundamental para que se produzca una evacuación correcta y total del intestino, evitando esfuerzos innecesarios. Básicamente el retrete actual está mal diseñado ya que nos hace mantener una postura antinatural para la defecación. En la imagen siguiente os lo explico de forma más gráfica. Desde pequeños nos han enseñado que esta es la postura correcta para ir al baño y por tanto la mayoría de nosotros nunca se ha planteado otra cosa. Sin embargo nuestra postura natural es de cuclillas y es muy diferente a la que adoptamos cuando nos sentamos en nuestros retretes «modernos». La invención y uso del retrate moderno por tanto no nos ha hecho sino mal, ya que al no permitir una evacuación total, esto nos afecta y contribuye a numerosos trastornos que van desde el estreñimiento a otros problemas más graves.

El Dr. Henry L. Bockus, considerado uno de los padres de la gastroenterología moderna ya afirmó en 1974: «la postura ideal para defecar es la posición de cuclillas, con los muslos flexionados sobre el abdomen. De esta manera disminuye la capacidad de la cavidad abdominal y aumenta la presión intra-abdominal, que favorece la expulsión».

Tal como se observa en la imagen, el músculo puborrectal juega un papel fundamental en este proceso, ya que es el encargado de contener las heces mientras no queremos expulsarlas «sujetando» al recto. Al sentarnos en el retrete el recto se afloja pero solo lo hace parcialmente. Sólo la postura natural en cuclillas permite que el músculo puborrectal libere por completo el recto y por tanto las heces tengan en camino libre para salir. 
El doctor francés Frédéric Saldmann explica con un ejemplo muy sencillo lo que ocurre: «Pensad en una manguera de riego llena de agua medio doblada: cuesta que el agua salga. Es exactamente lo que ocurre al estar sentado. Cuando el sujeto se pone de cuclillas el ángulo se abre, el pliegue desaparecer y el agua puede evacuarse con facilidad».

La evacuación incorrecta no solo está relacionada con el estreñimiento o las hemorroides, sino también con trastornos más serios como muestra la siguiente tabla.

Una buena solución para adoptar una postura lo más parecida posible a estar de cuclillas sería poner un taburete en los pies para poder subir las piernas y poder flexionar los muslos sobre el abdomen y así facilitar la evacuación. Algo parecido a lo que os muestra la siguiente imagen.

Con esta postura la evacuación será más rápida, fácil y completa. Incluso notaréis que usáis menos papel higiénico. Esto hace que haya un menos estancamiento fecal, que es uno de los factores que contribuyen al desarrollo del cáncer de colón, la apendicitis y las enfermedades intestinales inflamatorias como la enfermedad de Crohn o el síndrome del intestino irritable. Previene el estreñimiento y protege los nervios que controlan la próstata, vejiga y útero.
Otra cosa importante es que en esta postura la válvula ileocacal, que es una válvula que se encuentra entre el colon y el intestino delgado, se cierra completamente evitando así que haya fugas y se contamine el intestino delgado
Evita que hagamos un esfuerzos innecesarios a la hora de evacuar y por tanto evita la aparición de hernias, hemorroides, diverticulitis y prolapso de órganos pélvicos.
Además para las mujeres embarazadas esta postura evita la presión sobre el útero y ayuda a que tengan un parto más natural.

Adoptando esta postura en unos días probablemente notéis ya cambios significativos, y si además adoptáis una dieta basada en verduras, frutas, cereales integrales y grasas saludables, los cambios serán aún mayores.