En los últimos años están aumentando los problemas relacionados con la fertilidad y numerosos estudios relacionan esto con la alimentación y el estilo de vida, entre otras cosas. ¿Cómo se define la infertilidad? Los expertos hablan de infertilidad cuando una pareja tiene problemas para concebir después de un año de estar intentándolo de forma regular. El problema lo puede tener el hombre, la mujer o incluso ambos.
En los hombres cada vez es más común que se presenten casos de oligospermia, que quiere decir que existe una producción de espermatozoides más baja de lo normal y muchas veces ocurre que los espermatozoides que se encuentran, además, son de baja calidad tanto morfológicamente como en sus movimientos que no son los adecuados. En las mujeres los problemas de fertilidad suelen venir dados por la presencia de óvulos que presentan defectos a nivel cromosómico que impiden que se produzca un embarazo normal o que incluso de produzcan abortos.
Pero, ¿por qué ocurre esto tanto en hombres y mujeres?. Os señalo a continuación algunas de las causas:
- Obesidad. El exceso de peso y acumulación de grasa en el organismo está relacionado con una fertilidad disminuida.
- Falta de nutrientes. Es necesario tener en cuenta que para que nuestro organismo y las células que éste alberga funcionen de forma óptima el cuerpo necesita numerosos nutrientes que debemos aportarle con nuestra alimentación diaria. Si este aporte no es suficiente, nuestro organismo no va a funcionar de forma óptima y esto puede afectar a nuestras células germinales, óvulos y espermatozoides.
- La edad. Conforme nos vamos haciendo mayores la fertilidad disminuye porque se producen más errores a nivel cromosómico y de división celular. Sin embargo podríamos prevenir el envejecimiento celular mediante una alimentación y un estilo de vida adecuado.
- Problemas en la tiroides
- Toma de determinados medicamentos como antidepresivos y otros.
- En mujeres los ovarios poliquísticos y la presencia de miomas o fibromas pueden interferir en la fertilidad.
- En hombres problemas de erección o alteraciones como el varicocele.
- Diabetes.
- Problemas a nivel morfológico tanto en hombres como en mujeres.
- Enfermedades crónicas e inflamatorias.
- Insuficiencias renales y hepáticas.
- Desequilibrios hormonales.
- Estrés continuado.
- Exceso de toxicidad.
- Origen desconocido.
Como veréis, muchos de los problemas del listado anterior están directamente relacionados con el estilo de vida y la alimentación. Y uno de los factores principales es el exceso de azúcar y carbohidratos refinados en nuestra alimentación diaria. ¿Por qué?. Estos alimentos representan muchas veces un porcentaje muy alto de nuestra dieta, lo que hace que los niveles de insulina aumenten en el organismo, provocando mayor acumulación de grasa en el cuerpo y también mayores niveles de inflamación y estrés oxidativo. Todo esto origina desequilibrios hormonales tanto en hombres y mujeres que influyen en la fertilidad. Estos consejos generales de nutrición y estilo de vida pueden ayudaros a mejorar la fertilidad:
- Eliminar azúcar y carbohidratos refinados y sustituirlos por alimentos integrales y sin refinar para evitar los continuos picos de azúcar que desequilibran nuestras hormonas. Una dieta basada en plantas que incluya grasas saludables y alimentos altos en fibra y nutrientes es la más adecuada en estos casos. Los productos animales aumentan la inflamación, especialmente las carnes procesadas y embutidos. La proteína animal es mejor reducirla y cuando se consuma es importante que sea de buena calidad, ecológica (para evitar la presencia de hormonas y antibióticos) y sin aditivos.
- Mejorar la salud intestinal también es fundamental ya que numerosas investigaciones relacionan el estado de nuestra flora intestinal con desequilibrios hormonales que pueden provocar problemas de fertilidad, entre otras cosas. También la intolerancia al gluten se ha relacionado con la infertilidad.
- Reducir la exposición a tóxicos es una medida muy importante para mejorar nuestras opciones de concebir, sobretodo es importante reducir las sustancias llamadas disruptores hormonales, como el bisfenol A, que se encuentran fundamentalmente en plásticos, latas, productos de limpieza y cosmética. La recomendación sería tomar alimentos ecológicos y utilizar productos de limpieza y cosmética naturales, así como evitar latas y sustituir el plástico por el cristal.
- Dormir suficiente y controlar el estrés son también dos medidas importantes que ayudan a nuestra fertilidad. Los baños calientes con sales, la meditación y algunos suplementos naturales como el magnesio nos pueden ayudar.
- Eliminar alcohol y cafeína. El alcohol aumenta los niveles de inflamación y la cafeína está relacionada con desequilibrios hormonales.
- Hacer ejercicio de forma regular contribuye a equilibrar nuestras hormonas y reducir los antojos de alimentos dulces y refinados.
- Existen numerosos nutrientes y suplementos que pueden ayudarnos a mejorar nuestra fertilidad, pero siempre si existe como base una alimentación adecuada. Según diversos estudios hay nutrientes como la l-carnitina, vitamina C, vitamina E, zinc, NAC (N-acetilcisteína), coenzima Q10, que pueden contribuir a mejorar la fertilidad masculina, por ejemplo. Otros nutrientes fundamentales para mejorar la fertilidad son la vitamina D, las vitaminas del grupo B y los ácidos grasos esenciales. También existen hierbas como el vitex o sauzgatillo y superalimentos como la maca que pueden ayudarnos. Otros alimentos importantes son todos los de la familia de las coles y para los hombres especialmente las pipas de calabaza por su alto contenido en zinc que mejora la producción y calidad espermática.
Estos consejos de alimentación y estilo de vida pueden ayudarnos a mejorar nuestras opciones de concebir, pero no solo eso, también nos pueden ayudar a mejorar la salud del bebé y tener un embarazo más saludable. Además, si os vais a someter a un tratamiento de fertilidad, también nos pueden ayudar a mejorar la eficacia de los tratamientos. Es muy importante tener en cuenta que cada cosa que comemos o hacemos influye directamente en nuestras células, nosotros elegimos si esta influencia es para bien o para mal. Lo mismo pasa en el embarazo, cada acción influye directamente en la salud del bebé, en sus células y en su ADN y no solo sobre el suyo, según la epigenética la salud de la madre influye no solo en el bebé sino en los hijos de nuestros hijos, ya que estamos dejando una impronta también en las células germinales del bebé que en el futuro servirán para concebir a otros seres. Por tanto si estáis pensando en tener un bebé, aunque no tengáis problemas de fertilidad, se recomienda que al menos 6 meses antes de la concepción llevéis unos hábitos de vida saludables ya que esto va a repercutir directamente en la salud de vuestro futuro bebé.
Los consejos que os he enumerado os pueden resultar muy útiles, pero si necesitáis consejo profesional o una plan adecuado a vuestras necesidades, o si presentáis algún trastorno que os puede estar impidiendo concebir, estéis o no haciendo un tratamiento de fertilidad, he elaborado un nuevo programa de apoyo a la fertilidad para parejas. Os dejo la información por si os interesa.
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