Hoy os traigo un maravilloso postre crudo que aprendí en un retiro con mis amigos de Vida en tu Comida. Por cierto, os recomiendo su web donde podéis encontrar más recetas crudas además de cursos y talleres tanto presenciales como online sobre este tipo de cocina.
Ingredientes (10 personas)
Para la base:
-3/4 Taza trigo sarraceno (previamente germinado y secado)
-1/2 Taza harina de almendras (previamente deshidratada y molida en seco)
-1/4 Taza (60g) harina algarroba o cacao en polvo
-5 dátiles (opcionales)
-1/4 Taza (45g) aceite coco
-1 pizca sal
-2 C. (30 ml.) agua
1. Derrite el aceite de coco al baño María.
2. En un robot de cocina triturar el trigo sarraceno, la harina de almendras, la harina de algarroba o cacao en polvo y la sal.
3. Añade los dátiles y tritura.
4. Añade el aceite de coco y tritura.
5. Coge un poco de masa, si se queda pegada entre los dedos, está lista, sino añade un poco de agua y tritura de nuevo.
6. Cubre la base de un molde redondo (mejor si es desmoldable) con esta masa y mételo en la nevera.
*Si la base anterior resulta muy complicada, se puede sustituir por una base más sencilla utilizando 1 taza de almendras y 1 taza de dátiles. Se trituran las almendras primero en el robot de cocina y se van añadiendo los dátiles de dos en dos. Añadir una cucharadita de agua si la base no se pega al presionarla sobre el molde.
Nota: Puedes encontrar en tiendas ecológicas y herbolarios trigo sarraceno germinado de la línea Raw de la marca vegetalia, aunque llevan un poco de sirope de agave, por lo que si lo usas para la base, es mejor poner menos dátiles.
Para el relleno:
-3/4 Taza (135g) aceite coco
-1 y 1/4 Tazas (125g) cacao en polvo
-2/3 Taza (80g) harina algarroba
-2 Tazas (250g) dátil remojado en 2 T. de leche de avellanas o agua (o cualquier leche vegetal que tengáis en casa) durante dos horas.
1. Derrite el aceite de coco al baño María
2. Tritura los dátiles junto con la leche o agua de remojo
3. Añade el cacao y la algarroba y tritura
4. Añade el aceite de coco y tritura de nuevo hasta que esté todo bien integrado.
5. Vierte el relleno sobre la base del molde e introduce de nuevo en la nevera. La tarta necesita un mínimo de hora y media en la nevera para que cuaje todo bien.
Nota: Si le añades la ralladura de 2 naranjas grandes al relleno, le daremos otro toque y obtendrás una tarta de chocolate a la naranja.
La puedes adornar con coco rallado, y/o alguna fruta de temporada, en mi caso he usado granada porque además de seer de temporada contrastan muy bien los colores.
Es una tarta de sabor muy intenso a cacao. A cualquiera que le guste el chocolate en su estado más puro, seguro que le encantará.
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