Tabulé de quinoa con hierbabuena, rúcula y pistachos

Estamos en verano y lo que más apetece son platos frescos y ligeros. Esta ensalada/tabulé es perfecta para estos meses y os encantará por la mezcla de sabores: hierbabuena, pasas, pistachos, rúcula, pimiento rojo…

La rúcula es un ingrediente fundamental en esta receta. Es muy típica de la vertiente mediterránea y pertenece a la familia de las crucíferas (como la col y el brócoli), que ya sabéis que son un tipo de verduras que me encantan, no solo por su sabor sino por sus excelentes propiedades nutricionales. Tiene un característico sabor ligeramente picante, esto es debido a unos compuestos llamados glucosinolatos, potentes antioxidantes que juegan un papel fundamental en la prevención de importantes enfermedades como el cáncer y ya se está estudiando su efecto para tratar esta enfermedad.

Otro de los grandes beneficios de la rúcula es su poder hepatoprotector, es decir, ayuda a proteger y mejorar el estado del hígado y tiene importantes efectos depurativos en nuestro organismo.

Es una verdura con gran contenido en vitamina C, hierro y ácido fólico, por lo que tiene propiedades revitalizantes y fortalecedoras de la sangre, sobretodo en casos de anemia y cuando existen síntomas de fatiga o cansancio. Tenemos que destacar también su gran contenido en vitamina A, sobretodo en forma de carotenos, importantes antioxidantes sobretodo para la vista.

Este delicioso tabulé es una idea para incorporar la rúcula en vuestra alimentación, pero es una hoja muy versátil que podéis añadir en cualquier ensalada, encima de unas tostadas integrales con aguacate y tomate o como parte de un bowl saludable.