Ha llegado el otoño y con él las manzanas. Este delicioso crumble lleva también higos, casi los últimos de su corta temporada. La mezcla queda riquísima, pero en realidad podéis hacerlo solo de manzana si no consiguieseis higos, y también queda muy bien. En mi caso, me habían regalado muchos higos y no sabía bien qué hacer con ellos, y se me ocurrió este dulce. Esta receta no lleva copos de avena, y por supuesto, como todas las recetas de mi blog, tampoco gluten y en este caso tampoco nada de azúcar, aprovechamos la fruta que es la que le aporta el dulce a esta receta.
Lo podéis acompañar de lo que os apetezca. Queda muy bien con yogurt de coco (receta aquí) o con un helado saludable como éste o sino con mantequilla de almendras (receta aquí).
- 2 tazas de harina de almendras o almendras molidas
- ½ taza de harina de coco
- 1 taza de harina de trigo sarraceno
- ⅓ de taza de aceite de coco crudo o virgen extra
- 2 manzanas grandes
- 1 cucharadita de canela
- ¼ cucharadita de cardamomo
- ⅛ de cucharadita de nuez moscada
- 10 higos aproximadamente
- opcional: mantequilla de almendras, yogurt de coco o helado saludable
- Preparar la masa mezclando la harina de almendras, la harina de coco y la de trigo sarraceno con el aceite de coco. La masa ha de quedar compacta , si hace falta más aceite, añadir un poco hasta que se pueda extender sobre un molde.
- Extender la mitad de la masa en un molde rectangular pequeño/mediano y poner en el horno a 180 grados unos 10-15 minutos.
- Mientras, pelar y cortar la manzana en cubitos y ponerlas a fuego lento con la canela, cardamomo y nuez moscada. En 10-15 min, cuando estén blanditas, apartar.
- Sacar el molde del horno y añadir los higos cortados y la manzana hecha.
- Por encima ir añadiendo trocitos de masa con la mano para hacer el crumble hasta cubrir toda la fruta.
- Meter en el horno otros 15 minutos o hasta que el crumble empiece a dorarse ligeramente.
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